Una historia con un final inesperado – Russell Lee
Las tecnologías de ADN se han convertido en una parte estándar de las investigaciones forenses. El análisis de ADN puede decir todo acerca de la persona de la que procede. El análisis de ADN también puede ayudar a identificar a una persona desconocida que de otro modo no podría ser identificada.
Pero ¿qué sucede cuando el ADN se ha degradado? La persona puede haber sido víctima de un incendio, ahogamiento u otro evento catastrófico que dañó los restos.
La tecnología también aquí puede ayudar. Por medio de PCR (reacción en cadena de la polimerasa) se puede replicar una sola copia de una cadena de ADN, lo que permite amplificarla en varios órdenes de magnitud. La PCR en tiempo real (también conocida como cuantitativa o qPCR) incluso permite que el proceso de replicación sea monitoreado en tiempo real, mientras está ocurriendo.
Un caso forense reportado por el estado de Victoria, Australia, destaca los beneficios – y las limitaciones – de trabajar con el ADN degradado.
Los restos humanos se encontraron en un parque nacional. Los investigadores esperaban conectarlos con un caso conocido de una persona desaparecida. El perfil del ADNn (ADN nuclear) mostró una coincidencia con la madre de la persona desaparecida.
Sin embargo, el ADNmt (ADN mitocondrial) mostró algunas inconsistencias.
Como resultado, se realizó un perfil adicional de ADNn con el padre de la persona desaparecida. Se encontraron más inconsistencias. A pesar de la coincidencia inicial del ADNn con la madre, los investigadores concluyeron que los restos no eran de la persona desaparecida en cuestión.
El Instituto Victoriano de Medicina Forense utilizó un chip DNA 1000 en un sistema Agilent Bioanalyzer para visualizar la amplificación por PCR de las muestras de ADN.
En conclusión, los investigadores enfatizan «la importancia de utilizar más de un tipo de análisis de ADN». Además, el estudio de caso subraya «la importancia de tener un enfoque multidisciplinario para investigar si un caso de persona desaparecida y los restos humanos no identificados son del mismo sujeto».